La mejor manera de pedírselo es la que te salga del corazón… ¡y de las tripas! Vamos que yo sólo te voy a dejar aquí unas cuantas ideas para pedir matrimonio en Navidad, pero nadie mejor que tú sabe cuál es la perfecta para vosotros. Busca en vuestra relación, hurga en los lugares más recónditos, en los recuerdos más íntimos… ¿Estáis dispuestos a jugar?
Ideas para pedir matrimonio en Navidad
- Aprovecha las luces o la nieve. Es el momento idóneo para sorprenderla, para decírselo de una forma completamente diferente. Además ¿a quién no le flipan las lucecitas? Puedes dejarle El Mensaje con luces o escribirlo en la nieve, ¡no se lo esperará en absoluto! Después de una buena cena bajo la luz de las velas en vuestro restaurante favorito o uno buscado para la ocasión en un precioso pueblecito en la nieve puedes encontrar el momento perfecto. El factor sorpresa te lo doy yo, ahora está en tus manos personalizarlo.
- Si deseas escapar del frío. No lo digo yo, es de sabiduría popular: las playas del Caribe son el lugar idóneo para huir del frío y reencontrarse con el verano. La arena blanca y fina puede jugarte una mala pasada si llevas el anillo encima durante los días de sol hasta encontrar el momento perfecto. Por eso keep calm, respira y, con una botella de champán y un buen atardecer, ármate de valor y pídeselo. ¡Le encantará, eso está asegurado! No olvides llenar la habitación de rosas blancas (por ejemplo) para la vuelta, será la guinda para un día tan especial. Y, sobre todo, pide ayuda en el hotel antes de llegar al destino, muchos de ellos tienen paquetes especiales para este tipo de pedidas (mesa en la arena para vosotros solos bajo las estrellas y mil detalles para que la ambientación sea inmejorable).
- A modo de yincana. Saca tu parte más creativa, que no se noten los años, ni las canas, ni las cañas… saca a ese niño que llevas dentro creando un yincana por toda la casa y que se sienta Lara Croft. Por el camino puedes ir dejándole notas con frases de amor o de humor para ir creando ambiente (no te pases de gracioso no vaya a ser que se cabree y la cosa acabe en todo lo contrario). Y el recorrido puede acabar en el árbol de navidad o en el jardín donde pueden empezar fuegos artificiales y tu gran pregunta esté escrita en una pizarra. Después de la diversión vendrá la gran sorpresa <3.
- Si deseas que sea íntimo. Para estar a solas lo mejor que puedes hacer es llevarla de viaje. Cualquier lugar donde haya nieve o ambiente otoñal te ayudará a que tu pedida de mano navideña sea ideal. Un lugar mágico es en lo alto de la Torre Eiffel, con la preciosa París a vuestros pies en estas fechas tan bonitas, o una preciosa cena en barco por el Sena. Después de una noche fantástica iros a desayunar al Angelina.
- Si deseas que la familia participe. Vamos a decirlo: si se lo pides en estas fechas es muy probable que esto pase aunque no quieras. Pero si sois de esas familias legendarias de las que no quedan, que pasan la Navidad sin pullitas a la suegra, ni piques entre primos, ¡adelante! Puedes hacer que todos contribuyan a la sorpresa, ayudándote a hacer la pregunta o a crear el momento idóneo. Después puedes descorchar una botella de cava (o de ron si sois una familia pirata) y con un buen brindis celebrar también el amor, la unión, la integridad de la familia y que le acabas de pedir matrimonio en Navidad.
¡Y a ti, mujer! No esperes a que sea él quien te lo pida. Aunque nunca se atreverán a reconocerlo, también tienen su parte sensiblera y están esperando que los sorprendas. ¿Te imaginas siendo tu quien se arrodille delante de él? Yo no me imagino nada más bonito que eso. ¿Te animas?
¿Y a ti cómo te gustaría que te lo pidiesen? ¿Tienes alguna idea para pedir matrimonio en Navidad?